El mes pasado, un líder de equipo me comentó que su empresa estaba dando a los desarrolladores total libertad para comprar suscripciones de IA con cuentas personales, “solo para ver cómo podían transferirlas al trabajo”. Este enfoque bienintencionado ilustra a la perfección por qué muchas organizaciones en expansión ven que la adopción de la IA genera más problemas que soluciones.
La narrativa de la industria en torno a las ganancias de productividad de la IA—”Desarrollo 40 % más rápido”, “productividad de los ingenieros 10 veces mayor”— crea una peligrosa presión social que empuja a los equipos a adoptar herramientas apresuradamente sin una integración adecuada en los procesos existentes. Para los directores de tecnología que gestionan equipos en crecimiento, esto supone un desafío: la brecha entre la productividad percibida y la productividad real.
La trampa de la productividad de la presión de grupo
Cuando todos afirman mejoras drásticas en la productividad gracias a la IA, los líderes se sienten presionados a lograr ganancias similares. Esta adopción suele manifestarse de tres maneras:
Los equipos se saltan las fases de evaluación y capacitación de herramientas para ponerse al día rápidamente. Los responsables de calidad disminuyen los puntos de control para demostrar un retorno de la inversión inmediato. Se comienzan a medir las métricas equivocadas—líneas de código generadas en lugar de funciones entregadas, velocidad de implementación en lugar de calidad de la solución.
¿El resultado? Los equipos se sienten más productivos porque la IA genera código rápidamente, pero los plazos de entrega reales permanecen sin cambios o incluso se extienden debido al aumento de los ciclos de depuración y reelaboración.
Por qué la IA amplifica la disfunción del equipo
El éxito de la adopción de IA se correlaciona directamente con la madurez del equipo, no con la sofisticación de las herramientas.
Los equipos maduros con procesos sólidos pueden integrar la IA como una herramienta más, manteniendo la disciplina en cuanto a la calidad del código, las decisiones de arquitectura y las prácticas de prueba. Estos equipos comprenden que la IA destaca en el desarrollo de estructuras y el código repetitivo, pero aún requiere juicio humano para la resolución de problemas complejos.
Los equipos en desarrollo —precisamente aquellos con mayor probabilidad de adoptar herramientas de IA precipitadamente bajo la presión competitiva— carecen de los procesos fundamentales para usarlas eficazmente. Utilizan la IA como una muleta en lugar de un multiplicador, omitiendo el aprendizaje de los principios fundamentales que hacen valiosos a los desarrolladores sénior.
La IA no corrige las debilidades del proceso; las expone y las amplifica. Las malas prácticas de revisión de código se vuelven catastróficas cuando los revisores no pueden distinguir entre código sólido generado por IA e implementaciones aparentemente plausibles, pero problemáticas.
La brecha entre la percepción y la realidad
El impacto que obtenemos al observar cómo la IA genera código crea una ilusión de progreso. Los equipos combinan la actividad (más confirmaciones, implementaciones iniciales más rápidas) con resultados como funcionalidades funcionales y usuarios satisfechos.
Sin embargo, el andamiaje representa aproximadamente el 20 % del trabajo de desarrollo real. El 80 % restante (comprender los requisitos, diseñar arquitecturas sostenibles, gestionar casos extremos e integrarse con los sistemas existentes) aún requiere experiencia humana y resolución colaborativa de problemas.
El tiempo ahorrado en la codificación inicial a menudo se dedica a depurar, refactorizar y explicar el código generado por IA a compañeros que no participaron en su creación. El conocimiento que debería permanecer dentro de la organización permanece bloqueado en cuentas individuales de herramientas de IA, lo que genera nuevas formas de deuda técnica.
La solución de la disciplina
La adopción de IA requiere más disciplina de proceso, no menos. Esto parece contradictorio cuando la promesa es un desarrollo más rápido y sencillo, pero las organizaciones en expansión que abordan la IA estratégicamente obtienen ganancias reales de productividad.
Esto comienza con la alineación de las mediciones. En lugar de monitorear las métricas de uso de la IA, concéntrese en los resultados de entrega: tiempo de ciclo desde la solicitud de una función hasta la producción, tasas de defectos y niveles de satisfacción del cliente. Estas métricas revelan si la adopción de la IA realmente está mejorando la eficacia del equipo.
A continuación, establezca directrices claras sobre cuándo y cómo utilizar las herramientas de IA. ¿Qué tipos de tareas se benefician de la asistencia de la IA? ¿Qué controles de calidad deben seguir siendo controlados por personas? ¿Cómo se garantiza la transferencia de conocimiento cuando la IA genera soluciones?
Por último, refuerce sus prácticas de revisión y prueba de código, en lugar de relajarlas. El código generado por IA requiere un mayor escrutinio, no menos, ya que los revisores deben verificar la corrección y la mantenibilidad de soluciones que no crearon.
Los equipos que observan mejoras de productividad gracias a la IA comparten una característica: abordaron la adopción como una iniciativa estratégica, no como una simple compra de herramientas. Invirtieron en capacitación, establecieron pautas de uso claras y alinearon los incentivos con los resultados reales.
Para los CTO en expansión, esto significa resistir la presión de mostrar un retorno inmediato de la inversión en IA y priorizar el desarrollo de prácticas sostenibles que se optimicen con el tiempo. La presión social es real, pero los equipos que se toman un tiempo para implementar la IA con cuidado superarán a los que la adoptan apresuradamente.
Si bien los principios que se describen aquí son sencillos, su implementación efectiva suele requerir una comprensión detallada del contexto y el nivel de madurez únicos de su equipo. Ahí es donde el coaching basado en evidencia marca la diferencia, acelerando su camino hacia una productividad sostenible. Exploremos cómo la medición personalizada y la disciplina de procesos pueden ayudar a su equipo a aprovechar la IA eficazmente sin caer en las trampas comunes de la productividad. Contáctenos hoy mismo y conversemos sobre cómo alinear su estrategia de adopción de IA con los resultados reales.
Discover more from The Software Coach
Subscribe to get the latest posts sent to your email.

 
                     
                     
                     
                     
                    